En su pronunciamiento tras la publicación en Wikileaks de los
documentos secretos de inteligencia, la Casa Blanca dijo que los EE.UU.
está tomando "medidas enérgicas" para encontrar a los responsables de
está filtración de información. "Estados Unidos condena enérgicamente la divulgación ilegal de información clasificada", fue el anunció de Hillary Clinton, Secretaria de Estado de los EEUU. "Esta
información pone en riesgo la vida de las personas, amenaza nuestra
seguridad nacional y socava nuestros esfuerzos para trabajar con otros
países para resolver problemas comunes".
Clinton también dijo que "Esta declaración no es sólo un ataque a
intereses políticos de Estados Unidos en el exterior. Es un ataque a la
comunidad internacional". Las alianzas y asociaciones, las
conversaciones y negociaciones sobre la seguridad y la prosperidad
mundial así como el progreso económico se varán notablemente afectados
por este comunicado.
Más de 250.000 documentos clasificados fueron obtenidos por WikiLeaks y sus contenidos compartidos con varios periódicos y diarios de todo el mundo, incluyendo The Guardian en el Reino Unido y aclamado New York Times.
El sitio web afirma que publicó la información para revelar las
contradicciones entre lo que Estados Unidos muestra al público y lo que
dice a puerta cerrada.
Hillary Clinton respondió a a lo anterior: "Quiero dejar claro, nuestra política exterior oficial no se establece a través de estos mensajes". "Nuestra
política es un asunto de interés público, tal como se refleja en
nuestras declaraciones y nuestras acciones en todo el mundo".
Además agregó: "No hay nada loable sobre poner en peligro a personas inocentes",
suponiendo que no hay nada valiente sobre sabotear las relaciones
pacíficas entre las naciones de las cuales depende en gran medida la
seguridad de los EEUU.
En medio de las revelaciones hechas hasta ahora (ya que aún queda pendiente otra entrega de documentos necesarios
clasificados), no están los detalles de la presión ejercida sobre los
EE.UU. por los estados árabes para tomar una pronta acción preventiva
contra Irán antes de que este país oriental termine de desarrollar armas
nucleares.
Así mismo, Clinton dijo que esto realmente "no es una sorpresa para nadie", agregando que las observaciones confirman que Irán "constituye una amenaza muy grave a los ojos de sus vecinos".
Clinton habló mientras se preparaba para una gira de cuatro días por
Asia Central y Oriente Medio, áreas que ocupan un lugar destacado en los
informes filtrados. Ella, a su vez, se reunirá con el presidente ruso,
Dmitri Medevedev y la canciller alemana Angela Merkel, quienes fueron
nombreados e insultados en los comunicados presentados por WikiLeaks.
Medvedev fue descrito como alguien que "juega a Batman y Robin de
Putin" y la señora Merkel se conoce como alguien que "evita los riesgos y
rara vez es creativa".
Cuando se le preguntó si estaba avergonzada por las fugas de
información confidencial, la Secretaria de Estado dijo, que alguien le
había dicho que se preocupara sólo por lo que habían dicho de ella.
A la luz de la libertad de prensa, al parecer, esta información se
filtró por medio de un joven del Ejército de EE.UU., el soldado Manning,
Bradley. Por su parte la administración Obama ha ordenado una revisión
de cómo es que está información sensible para muchos intereses se ha
manipulado.
Además, el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, dijo que el
gobierno de EE.UU. no descarta la posibilidad de emprender acciones
legales contra Wikileaks.
El gobierno de EE.UU., informará previamente del contenido del
documento que se filtró, mientras tanto se han puesto en contacto con
gobiernos de todo el mundo, incluida Rusia, Europa y Oriente Medio, para
tratar de limitar los daños hechos por este cable.
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